Después de varias socializaciones con gremios empresariales, alcaldes de diferentes municipios, y otros sectores, el gobernador Andrés Julián Rendón presentó el proyecto de un nuevo impuesto de seguridad en Antioquia.

Con los aportes se espera recaudar 1,2 billones de pesos para hacer inversiones en cinco proyectos claves: cámaras de seguridad, cárcel departamental, infraestructura para la fuerza pública, dotación de los escuadrones móviles y escenarios deportivos.

¿Quiénes pagarían este impuesto? El mandatario seccional explicó que el 85 % de los habitantes pertenecientes a los estratos 1, 2 y 3, estarían exentos de la contribución, que se aplicará entre el 1 de enero de 2025 y el 31 de diciembre de 2027, para sectores residenciales de estrato 4, 5 y 6, comerciales, industriales y oficiales.

“En Antioquia tenemos regiones muy complejas en materia de seguridad y municipios que no cuentan con los suficientes recursos para combatir este flagelo. Debemos mejorar en tecnología y dotación para la fuerza pública, por eso presentaremos esta iniciativa ante la Asamblea”, dijo el gobernador Rendón.

Esta iniciativa se presentará a la Asamblea Departamental, que tendrá la última palabra pero desde ya algunas alcaldías como la de Itagüí gremios de empresarios se oponen a la medida por el impacto económico.

La Gobernación de Antioquia explicó que el valor se calculará según el consumo de energía en kilovatio / hora —kWh por una fracción de la Unidad de Valor Tributario — UVT para el año vigente.

También puede leer: