El polígono de la discordia
La polémica por la intensión de la administración de La Estrella para cambiar 36 hectáreas rurales de la zona de expansión a zona urbana, aumentó en la última semana tras el cabildo abierto que se llevó a cabo en el Concejo Municipal, donde ambas partes, Alcaldía y la comunidad, defendieron sus puntos de vistas. PUBLICADO FEBRERO 2017
Dicho proyecto, el Plan Parcial San José, fue presentado por la Secretaría de Planeación en 2015 e implica la posible llegada de veinte mil nuevos habitantes y unos cinco mil vehículos, debido a que se aprobaría pasar de 70 viviendas a 250 por hectárea. Por lo que muchos temen un grave daño ambiental, especialmente a la reserva natural La Romera y se preguntan cómo será la adecuación de vías y la prestación de servicios públicos.
El objetivo es que en esas 36 hectáreas que pasarán de zona rural a urbana se puedan construir cerca de seis mil viviendas en los próximo 15 años, el 80% de ellas en proyectos de interés social. Pero este polígono está ubicado a cerca de 750 metros de la reserva natural El Romeral, por lo que el colectivo Defensores de El Romeral rechazan el proyecto, pese a que según concejales y la Planeación Municipal, no se afectará el ecosistema.
A mediado de ese mismo año, Corantioquia negó la solicitud luego de que el constructor no presentara la documentación exigida por la Entidad ambiental para dar la viabilidad ambiental. “No se logró llegar a concertación y el proponente no suministró la información requerida en los asuntos ambientales, tal y como es el certificado de factibilidad de los servicios públicos, entre otros”, advirtió en ese entonces Liliana Taborda, directora de Corantioquia Territorial Aburrá Sur.
En comunicación enviada por esta Entidad al Concejo Municipal el pasado 31 de diciembre, advirtió su preocupación por la discusión nuevamente del proyecto sin que aún no se haya presentado solicitud alguna ni documentación para lograr dicha modificación. Y explicó, tras una visita el pasado 3 de enero, que solo se garantizará no afectar la reserva si las construcciones estén a más de mil metros de esta.
Por ello, Luis Javier Robledo, uno de los opositores al proyecto, aseguró que el proyecto no es conveniente por todas las afectaciones que acusaría. “Hay un temor de las zonas de amortiguamiento en la reserva, la ley demanda que debe tener factibilidad de servicios públicos de manera inmediata pero eso no existe en este momento, incluso los actuales habitantes tenemos problemas para acceder al agua potable”, expresó.
El secretario de Planeación de La Estrella, Gregorio Fernández, aseguró que la movilidad se garantizará la ampliación de vías por parte de los constructores, así como con los proyectos que se adelantan desde el Municipio y con el Área Metropolitana. “Estamos trabajando en la ampliación de la vía a Comfama con la 87 sur en doble calzada, la circunvalar occidental, la ampliación de la 77 sur hasta la zona céntrica y ya está en diseño la construcción de la vía San Andrés”, explicó.
En cuanto a los servicios públicos, el funcionario indicó que con EPM se trabaja en la ampliación de la red de acueducto hasta Caldas, la llegada a Pueblo Viejo y Tablaza, así como la construcción de dos tanques en la vereda San José.
Después del cabildo abierto, se espera que en 15 días esté listo el proyecto, que será revisado por la comisión del Concejo Municipal y pasará a debate entre los concejales, que en su mayoría lo aprueban. De aprobarse, en 48 meses estaría en pie el primer edificio. “No nos podemos negar al progreso, necesitamos recursos frescos para el desarrollo y crecimiento, y estamos planificando el municipio a 20 años”, defendió el Secretario de Planeación.
Por eso los defensores de El Romeral preparan ya una demanda ante el Tribunal de Antioquia al considerar que el polémico proyecto no cumple con los requisitos de ley y solo pretende beneficiar intereses particulares, “sabemos que las cargas urbanísticas las pagan en dinero y el Municipio las invierte en otras cosas diferentes no en las necesidades”, dijo Luis Javier Robledo, quien teme que su municipio viva una crisis inmobiliaria como la que padece Sabaneta.
Alejandro Calle Cardona
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