Demolición de Babilonia tardará dos meses más
Los hallazgos del contratista demoledor revelan que solo el 27% de la estructura es igual a la presentada en los planos originales, lo que incrementó el nivel de riesgo y disminuyó la capacidad de operación.
JULIO 11| 2019
Aunque se esperaba que el edificio Babilonia fuera demolido en dos meses, el contratista solicitó 60 días más para efectuar el desmonte total de los 13 pisos pues, según sus estudios, solo 27% de la construcción conserva lo presentado en los planos que fueron aprobados por la Curaduría Primera de Itagüí y solo cerca del 10% de la estructura cumple con las normas de sismo resistencia.
“Lo que hemos encontrado es atípico, las fallas son tantas que el riesgo es mucho más elevado del que habíamos presupuestado y el tiempo de operación en cada piso ha sido mucho mayor”, explicó el representante legal de Jola S.A.S, Luis Alberto Suaza.
Vigas que fueron construidas con la mitad del grosor presentado en planos, la cantidad de acero, la calidad del concreto, un número de vigas y nervios mucho menor al requerido, y la asimetría entre la estructura de los costados norte y sur son algunas de las fallas que explican la torsión del edificio en los meses pasados y que solo pudieron ser identificadas una vez que avanzaba el proceso de demolición de los pisos superiores.
Hasta ahora la demolición llega al piso nueve y, de acuerdo con el contratista, ya se han retirado unas 2.000 toneladas de material, lo que ha ayudado a disminuir el riesgo de colapso, sin embargo, la alerta permanecerá, al menos, hasta que se derribe el piso 6 de la edificación.
A los causales del retraso en el cronograma inicial se suman las lluvias que han obligado a suspender las actividades dentro de Babilonia durante unos 12 días para garantizar la seguridad de las 40 personas que trabajan en la demolición.
Se mantiene la orden de evacuación
En los próximos días se cumplirán los tres meses de arriendo subsidiado que la administración municipal le otorgó a las 45 familias vecinas que fueron evacuadas, sin embargo, no podrán retornar a sus viviendas hasta que la demolición llegue al piso 5 y se compruebe que no hay riesgo de colapso, o que el estándar de riesgo es muy bajo. “Esperamos en el menor tiempo posible levantar la orden de evacuación para recuperar la normalidad en el sector, en la medida en que avance la demolición esta podrá ser más controlada y eficiente”, aseguró el secretario jurídico Óscar Darío Muñoz.
A la fecha más de cinco entidades, entre ellas la Fiscalía, la Procuraduría y la superintendencia de Industria y Comercio, adelantan investigaciones sobre este caso. Mientras tanto, propietarios y vecinos afectados tendrán que seguir esperando sin saber si en algún momento aparecerá el constructor para responder por los daños y perjuicios materiales y emocionales.