Luego de varios meses de trabajo, que incluso generaron protestas en la comunidad, hoy la expansión de la red de acueducto en Caldas es una realidad. Las obras incluyen las veredas La Chuzcala, La Inmaculada y La Miel, y a sectores como La Tablaza, San Miguel y Pueblo Viejo, considerados zona de expansión de La Estrella.

Según EPM, a partir de octubre, una vez finalicen los trabajos de adecuación de la nueva tubería, 110 mil hogares y negocios disfrutarán de un servicio de acueducto con mayor continuidad y más confiable.  Esto se debe a que el suministro de agua potable no dependerá de una sola fuente de abastecimiento, como ha sido históricamente el caso de Caldas con la quebrada La Valeria, lo que reducirá su vulnerabilidad ante fenómenos como El Niño y La Niña.

“El apoyo y respaldo de las autoridades y líderes locales permitió superar oportunamente los retos de garantizar la movilidad mientras las obras avanzaban y el uso temporal de espacios urbanos para facilitar los trabajos constructivos.  Hoy celebramos el resultado de un esfuerzo conjunto que fortalece la seguridad hídrica del sur del Valle de Aburrá”, manifestó John Maya Salazar, gerente general de EPM.

Estas obras tuvieron una inversión cercana a los 286 mil millones de pesos y permitirán atender la demanda de agua potable en esta zona del sur del Valle de Aburrá que sufre un crecimiento y desarrollo urbanístico.

Actualmente, la EPM trabaja en la pavimentación de las vías y adecuación de los sitios intervenidos durante las obras, lo que se espera mejore la movilidad de la vía entre La Estrella y Caldas.

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