Fue un día atípico como ningún otro en este municipio. El día comenzó con el colapso de la iglesia del barrio San Pío X antes del mediodía, luego el fuerte aguacero generó varias emergencias, entre ellas la caída de una valla sobre una vivienda y un incendio en una fábrica.

La edificación construida hace más de 60 años y que hacía parte del Bien Patrimonial del municipio se fue al piso pasadas las once de la mañana. Por fortuna la zona había sido acordonada desde el miércoles por el riesgo inminente de colapso, por lo que allí ya no se realizaban eucaristías y se pudo evitar una tragedia.

Las autoridades atendieron la emergencia y adelantan las investigaciones para establecer las causas, pero el secretario de Gobierno de Itagüí, Juan Carlos Zapata, aseguró que el techo había sido cambiado hace cerca de diez años y se establecerá si contaba con las licencias necesarias. “La estructura no aguantó el peso del techo y cedió. Afortunadamente ordenamos el cierre de manera preventivo”, explicó el funcionario.

La preocupación ahora de los feligreses es qué pasará con los restos y cenizas de sus seres queridos ubicados en el osario de la parroquia. Se está a la espera de que los organismos de socorro ingresen al área afectada.

AGUACERO Y MÁS EMERGENCIAS

La comunidad no había salido del susto, cuando una fuerte tormenta provocó inundaciones en vías del sur del Valle de Aburrá, especialmente en Itagüí donde una valla publicitaria cayó sobre contra la pared de una unidad residencial y fracturó paredes y destruyó ventanas.

Según el reporte del Siata, se registraron fuertes vientos  que levantaron y sobre el municipio cayeron 40 descargas eléctricas. Una de ellas provocó un corto circuito y un incendio en una industria de insumos de textiles en la zona de Mueblería Unida.

De inmediato los bomberos atendieron la emergencia que no dejó afectados, sin embargo dos bomberos resultaron lesionados, uno con fractura y otro con quemaduras.