La encuesta de percepción de calidad de vida Aburrá Sur Cómo Vamos concluyó que el tema clave en el que Caldas debe poner los ojos y entrar en acción es la vivienda. A la problemática de urbanización y mal uso de suelos se le suma el empleo como el aspecto que presenta mayor desigualdad y difícil acceso.

ABRIL 26|2019

Pero lo más preocupante del informe es la percepción general de que que las cosas no marchan bien. Los ciudadanos no confían en la administración actual ni mucho menos en los políticos. Solo el 12% cree que la Alcaldía invierte bien los recursos, una cifra alarmante cuando los municipios que le siguen llegan al menos al 58% de satisfacción.

Además, el 69% cree que la corrupción ha aumentado y un 26% considera que sigue igual. Y como si fuera poco, el Concejo Municipal también obtuvo la calificación de credibilidad más baja con solo un 8% de favorabilidad y un 35% de desaprobación de su gestión.

Los habitantes de Caldas son los más pesimistas de toda la región, solo la mitad de los encuestados cree que el municipio va por buen camino, menos del 20% son optimistas frente al futuro de la economía y el 85% cree que es complejo encontrar trabajo dentro de la localidad.

La misma tendencia se presenta al evaluar otros aspectos como la seguridad, la movilidad o el espacio público: apenas un 75% se siente seguro en su ciudad, la conformidad con el estado de las vías es de un 73%, más del 50% cree que le está tomando más tiempo recorrer los trayectos habituales y la satisfacción respecto al espacio público disponible para la comunidad es apenas del 58%, cifra que está casi 20 puntos porcentuales por debajo de la media regional.

Estas cifras poco alentadoras son sin duda un llamado a la reflexión para que la administración municipal se pregunte qué está haciendo mal, qué no ha hecho y qué acciones en el corto plazo puede tomar para resolver los problemas de una comunidad que los eligió y que siente defraudado el voto de confianza que le dio a sus gobernantes actuales.