Solo hasta mediados de junio se terminarán los estudios que adelantan para definir cómo y cuándo se construirán las instituciones educativas que hoy sufren graves retrasos. Esto, tras la reunión del pasado jueves con representantes del Ministerio de Educación y contratistas e interventores de las obras de los colegios José Miguel de La Calle y Normal Superior. La comunidad educativa realizó un plantón en la Alcaldía para manifestar su inconformidad.

MAYO 26| 2019

Juan Carlos Franco, director del Fondo de Financiamiento de la Infraestructura Educativa -FFIE, entidad del Ministerio de Educación que tiene a cargo la construcción de los ‘Colegios 10’, aseguró que los tiempos se han dilatado porque la interventoría se “ha tomado mucho tiempo en presentar los informes de incumplimiento”. El funcionario cuestionó que apenas hace un poco más de una semana la empresa interventora presentó un informe en el que se reportan 281 días de retraso en obra, es decir, casi 10 meses.

“Las empresas interventoras se excusaron en detalles técnicos que de ninguna manera sustentan los retrasos de un año y medio. Están perjudicando a toda una comunidad educativa y ni siquiera tienen una justificación para el incumplimiento”, manifestó Luis Gabriel Porras, representante de Asopadres de la I.E. Normal Superior de Envigado.

Por su parte la Alcaldía ratificó que ha cumplido con su parte, entregando los recursos correspondientes por más de 8 mil millones de pesos y que están guardados en una fiducia a cargo del FFIE hasta que se reinicien las obras. “Hemos hecho toda la gestión humana, técnica y financiera posible, pero no es un problema del municipio sino de todo el país. Valoramos que el FFIE venga a darnos la cara, pero nos quedamos con la insatisfacción de que no tenemos fechas de arranque de obra para nuestra infraestructura educativa”, recordó la alcaldesa, Sara Cuervo.

Estudiantes, docentes y padres de familia manifestaron con pancartas y carteleras su rechazo al proceso que el Fondo ha adelantado con los contratistas y expresaron su insatisfacción e inconformidad por la afectación en la calidad educativa y de vida que han recibido los estudiantes desde que dejaron sus antiguos colegios.

Por ahora la novela de ‘Colegios 10’ continúa y mientras tanto los estudiantes tendrán que seguir recibiendo clases en colegios prestados, con jornadas académicas más cortas, privándose de actividades extracurriculares y extrañando los buenos días en que tenían sus salones, sus docentes y su espacio.

“Nos desacomodaron la vida a los estudiantes y a las familias. No queremos que nos pidan disculpas, queremos que las obras empiecen ya, queremos los colegios para nuestros hijos”, aseguró Porras.